¿Sabías que la pérdida auditiva es la tercera afección en importancia después de la artrosis y la hipertensión arterial?
El origen de la pérdida auditiva puede ser variado, pero la presbiacusia es la principal causa.
La presbiacusia es la pérdida auditiva relacionada con la edad. No es considerada una enfermedad sino una manifestación normal del aparato auditivo en la edad avanzada.
Es posible que su aparición esté además favorecida por algunas enfermedades como: infecciones de oído, traumatismos, exposición en ambientes ruidosos, arteriosclerosis, hipertensión arterial, diabetes y utilización de medicación ototóxica.
¿Cuándo deberías hacerte una revisión audiológica?
La recomendación es hacerse una revisión audiológica una vez al año especialmente a partir de los 50 años.
Detectar los síntomas
Generalmente las personas acuden a revisión porque no oyen bien. En algunas ocasiones las personas dicen oír bien pero no entienden lo que les dicen, sobre todo en ambientes ruidosos. También pueden aparecer ruidos en el oído y sensación de molestia a los ruidos intensos, esta situación limita su vida social y familiar.
Los síntomas más comunes son:
- Sensación de que los demás hablan entre dientes o vocalizan mal.
- Las conversaciones son difíciles de entender.
- Las voces de los hombres son más fáciles de entender que las de las mujeres.
- Algunos sonidos parecen demasiado ruidosos o molestos.
- Aparecen zumbidos en uno o ambos oídos.
Prevención
Como en muchas otras afecciones la prevención es de suma importancia para evitar el empeoramiento de la pérdida auditiva. Dos de los motivos por los que es importante una compensación de la pérdida son:
- Aislamiento social: el problema del aislamiento es que a menudo no se suele relacionar con una pérdida auditiva. Al no escuchar bien en reuniones sociales, la persona tiende a desconectar en las conversaciones ya que le supone un esfuerzo enorme poder entender al resto, así que poco a poco comienza a desvincularse de este tipo de reuniones. Algo parecido ocurre en casa, los acompañantes evitan la conversación al tener que levantar tanto la voz. Es muy habitual la negación del problema auditivo ya que se produce de forma progresiva y cuando ya es evidente la persona puede negarse a compensarlo con el uso de audífonos. Toda esta situación genera irritabilidad, depresión y aislamiento.
- Otro de los motivos por los que la prevención es muy importante es que la presbiacusia es un problema degenerativo en el que la audición se va perdiendo y no se recuperará (la pérdida auditiva viene provocada por la muerte de células del oído interno). Cuanto antes se compense la pérdida, antes se disminuirá la velocidad de esa muerte celular, además, las compensaciones auditivas serán más cómodas y rápidas cuanto menor sea la pérdida auditiva.
¿Qué tratamientos existen?
Las posibilidades de tratamiento son:
- Evitar ruidos fuertes y reducir la exposición al ruido.
- Utilizar tapones para los oídos.
- Utilizar audífonos en uno o ambos oídos.
- Amplificadores telefónicos.
PREGUNTAS FRECUENTES SOBRE AUDÍFONOS
¿Cuándo debemos usar un audífono?
Cuando detectamos un problema auditivo debemos hacer la revisión con el médico otorrinolaringólogo o con un audioprotesista (profesional que se encarga de la adaptación y prescripción del audífono). Estos profesionales nos indicarán cuándo se debe empezar a utilizar un audífono, ya que no todas las pérdidas se pueden compensar de esta manera, por eso es clave una buena revisión audiológica para asegurarnos de una buena prescripción.
¿Cuánto cuesta un audífono?
El precio de un audífono depende del modelo, tamaño, prestaciones, etc. Suele oscilar entre los 400 € hasta más de 1.500 € por cada audífono en caso de ser de tecnología digital. Por ello, el precio dependerá del problema concreto y de las necesidades particulares de audición, a mayor pérdida, mayor potencia necesitaremos y mayor precio. El importe cubre el aparato, el molde fabricado a medida, el estudio del problema auditivo, la calibración y verificación de la prótesis, revisión, etc.
¿Usar uno o dos audífonos?
Si cuando nos hacemos unas gafas nos gradúan para dos cristales es lógico pensar que si llevamos dos audífonos nuestra audición será más natural y mucho más eficaz.
¿Cuánto duran?
Dependerá del uso y cuidado que se les dé pero un audífono puede durar de 4 a 5 años.
¿Qué diferencia hay entre un audífono y un sonotone?
En televisión vemos a menudo anuncios de sonotones, pero pese a la apariencia inicial, no funcionan de la misma forma que los audífonos.
Los sonotones son amplificadores, es decir, aumentan el volumen general del sonido que reciben. Esto hace que se aumenten también los ruidos y todas las frecuencias indiscriminadamente, provocando distorsiones debido a la baja calidad del sistema.
Los audífonos en cambio ecualizan el sonido, de manera que sube o baja en las frecuencias en las que el paciente tiene problemas. De esta forma el sonido se equilibra y se adapta a las necesidades de cada persona.
